Cannabis medicinal: Se abre una puerta muy peligrosa, según toxicólogos

“No hay suficiente evidencia científica. Utilizar marihuana -aunque sea con fines terapéuticos- puede implicar graves daños a largo plazo en niños y adolescentes. Y otra cosa: puede haber una interpretación a nivel social de que la sustancia es inocua. Se abre una puerta muy peligrosa”. Estos son, en síntesis, los motivos principales por lo que al país no le conviene legalizar el uso del cannabis medicinal, dijeron a LA GACETA toxicólogos especialistas en el tema.

Susana de Ponce de León, magíster en Toxicología y ex-profesora de la cátedra de Toxicología de la Facultad de Bioquímica, Alfredo Córdoba, profesor de la UNT y jefe del Departamento de Toxicología del municipio capitalino, y Gustavo Marangoni, médico psiquiatra y experto en adicciones, se mostraron muy preocupados ante la media sanción de la ley que aprueba el uso de la marihuana medicinal.

Los médicos remarcaron que los estudios que avalan los efectos positivos del cannabis en distintas enfermedades son insuficientes. “Lo que sí está comprobado es que esta sustancia produce un daño muy serio en las neuronas (a nivel lóbulo frontal)”, expresa Marangoni.

“Los principales activos de la marihuana son el tetrahidrocannabinol (THC), el cannabinol (CBN) y el Cannabidiol (CBD). Este último sería (remarca el potencial) el que produce beneficios medicinales. El problema es que separar este activo de los otros (especialmente del THC, que es peligrosísimo) es algo delicado, sumamente técnico y muy costoso. Probar sus efectos en humanos es una tarea investigativa que aún no tiene buenos resultados. De lo contrario algún laboratorio de productos medicinales en el mundo ya lo habrían obtenido. Hecho éste que debiera llamarnos la atención. Quien hace un aceite casero seguramente no sabe qué le estará dando a su hijo”, remarcó Córdoba. Ponce de León dijo que está comprobado que esta sustancia, el THC, destruye la arquitectura de la neurona y eso genera que se vayan deteriorando funciones esenciales del cerebro.

“El cerebro necesita desde que nace 18 años para conformar su estructura emocional. En esos años es también cuando se logra la capacidad de comunicación que tiene el sujeto. La marihuana afecta directamente estas funciones. Yo le pregunto a los padres que les quieren dar aceite de cannabis a sus hijos: ¿les parece un buen precio a pagar, quitarles la capacidad de conectarse el mundo y de manejar sus emociones? En aras de un supuesto tratamiento se está produciendo un daño severo en el sistema nervioso central”, aportó Marangoni.

Ponce de León agregó que la marihuana facilita la muerte súbita, el desarrollo de arritmias y accidentes cerebrovasculares.

“Puede haber casos en los que ya se ha probado todo tipo de terapias y en los que verdaderamente no hay más opción que recurrir al aceite de cannabis. Entonces ahí, la sustancia tiene que pasar por toda una línea de investigación para que finalmente un laboratorio lo produzca, con todas las especificaciones, con los pro y los contra del medicamento, como también ocurrió con el caso de la morfina”, precisó Marangoni.

Los toxicólogos comentaron que todas las drogas ilícitas fueron descubiertas hace cientos de años por su poder terapéutico. “Y a medida que se usaban se fueron descubriendo los tremendos daños que ocasionaban, por lo que se las retiró del mercado. Si hablamos de beneficios, la cocaína es un excelente anestésico local. Pero a la hora de poner en la balanza, son mucho más los contra que los pro. Para nosotros, legalizar el cannabis es un verdadero retroceso”, recalcó Ponce de León. Córdoba señaló con temor que este hecho podría convertirse en la puerta de entrada a la legalización del consumo de marihuana. El experto se quejó de que los diputados no hayan escuchado los consejos que dieron reconocidos profesionales nucleados en la Asociación Argentina de Toxicología, quienes en varios puntos dijeron que no era conveniente legalizar el aceite porque hace falta hacer más estudios. “Los preparados artesanales, basados en la extracción de variedades de Cannabis con alta concentración de cannabidiol (CBD), ofrecen riesgos que aún la ciencia no puede medir ni predecir”, precisaron.