“La enemiga del cerebro de los jóvenes”

El experto en adicciones Gustavo Marangoni y miembro de la fundación «Virgen de la Merced, Redentora de cautivos» define las previas como un fenómeno cultural durante el cual los jóvenes suelen beber alcohol para desinhibirse. “Un dato desconocido por muchos jóvenes -e incluso por sus padres- es que el consumo excesivo de bebidas con alta graduación alcohólica causa daños irreversibles en su cerebro”, resaltó.

Según explicó, los problemas aparecen apenas se pasa la barrera de los 75 gramos de alcohol, lo cual equivale a un poco más de un litro de cerveza o tres medidas de fernet.

Aunque sea solo durante los fines de semana -añadió Marangoni- se ha comprobado que la ingesta de alcohol provoca daños irreversibles en un cerebro que está en pleno proceso de maduración (hasta los 18 años en mujeres, 21 en varones). “Hay evidencias clínicas de que el alcohol en niveles tóxicos a esta edad afectará en el futuro la estabilidad emocional de la persona, la atención, el control de los impulsos. Ni hablar de otros riesgos más inmediatos: accidentes y hechos violentos en los que todos los fines de semana dejan la vida los jóvenes a causa del alcohol”, resaltó. El especialista agregó que mezclado con energizantes puede causar convulsiones o intoxicaciones graves.

¿Qué consejo les daría a los padres que dicen que prohibir es peor?

“Hasta que el chico no llegue a los 17 o 18 años, sólo puede beber medio litro de cerveza, lo cual es una tarea complicada porque con esa cantidad no llegarán a cumplir su objetivo, que es desinhibirse. Como padres, hay que aprender a poner límites. Se qué es difícil y que muchas veces no saben cómo hacerlo porque significa enfrentarse a ellos en una etapa de la vida muy complicada. Sin embargo, el límite es una gran herramienta: con él les damos a nuestros hijos la capacidad de realizarse en el futuro, con él aprenden a elaborar las frustraciones y a superar los desafíos, a hacer introspección y a no culpar al mundo de lo que les pasa”, destacó Marangoni.
Opinión de los padres

No llegar a una situación límite.- Luciana Lobos tiene una hija de 16 años. “En mi casa no se hacen previas. Tengo otro hijo de 20 y nunca se lo permití a él. No estoy de acuerdo en que tomen tanto. Trato de hablar mucho con ellos. Les pido que se cuiden, que traten de no llegar a una situación límite y que si ven a algún amigo así, tampoco lo dejen solo. Se que toman, pero uno o dos vasos. Permitirles que lo hagan en casa sería como banalizar la cosa, dejarlos que crucen un límite. Para mí, no da”, recalca la mujer de 45 años, docente.

No ir al choque.- Carolina Sánchez (44) dice que ella sí les permitiría hacer previas a sus hijos cuando sean un poco más grandes. Ahora tienen 13 y 15 años. “Pondría condiciones: que nadie pueda salir borracho de casa y mucho menos manejando. Además controlaría la bebida que traen. Creo que así me podría ganar la confianza de ellos. Me parece bien poder explicarles el daño que hace el alcohol y acompañarlos. Si uno es autoritario y va al choque, y sale perdiendo. Seguramente van a ir a otra casa o a otro lugar a hacerlo”.

cifras que preocupan

crece el consumo de alcohol entre los adolescentes, y les resulta fácil obtenerlo

Según un informe del Ministerio de Salud de la Nación, en una década el consumo de alcohol se duplicó entre los estudiantes secundarios. El 70% de los adolescentes lo consume, y ocho de cada 10 lo mezcla con energizantes. ¿Por qué consumen? Según otro estudio, del Observatorio de la Deuda Social Argentina, de la Universidad Católica Argentina, siete de cada 10 jóvenes dicen haber comenzado a consumir imitando a amigos y/o conocidos, o porque empezaron a salir (motivos relacionados con el mundo de la vida social y la entrada en el espacio público sin el control de los padres). Sólo uno de cada 10 indica haber comenzado a beber porque le gustan las bebidas. Para el 90% de los jóvenes es fácil comprar alcohol en nuestro país. opinión de los padres no llegar a una situación límite.-
http://www.lagaceta.com.ar/nota/710125/sociedad/enemiga-cerebro-jovenes.html