SE PRESUME QUE EXISTE UNA «ALIANZA CRIMINAL DEL MERCOSUR»Por: Paulo Kablan. Un avanzado sistema, que incluye vuelos nocturnos para transportar cocaína y dinero, habría sido detectado en los últimos meses por investigadores de la región que ya mencionan como posible una presunta «alianza criminal del Mercosur», de la que participarían proveedores y compradores argentinos, bolivianos, brasileños y paraguayos.
La mayoría de dichos vuelos, que llegarían a no menos de 50 diarios, partirían desde el departamento boliviano amazónico del Beni, en el noreste de dicho país, de donde son oriundos dos jóvenes pilotos que fueron detenidos el lunes pasado en la provincia de Salta cuando, por causas aún no demasiado claras, abandonaron la avioneta en un camino vecinal del departamento salteño de Anta y decidieron caminar por el monte.
Milo Suárez Gutiérrez (19) y Carlos Ernesto Torrico Ortiz (18) son los jóvenes bolivianos que por estas horas se encuentran detenidos en la Cárcel Federal de Güemes, en Salta. Uno de ellos, además, integraría una de las familias más poderosas de esa zona, con lazos con el extinto «Rey Blanco», el legendario y poderoso Roberto Suárez Gómez, quien, más allá de ser el gran proveedor y socio del colombiano Pablo Escobar Gaviria, fue interpretado en la película Scarface con el nombre de Alex Sosa por el actor Paul Shenar, que era el principal socio del personaje de Al Pacino, Tony Montana.
Tanto Suárez como Torrico, que pese a la corta edad son expertos pilotos y estudiantes universitarios, no abrieron la boca en la indagatoria en la causa que está en manos del juez federal salteño Miguel Antonio Medina y del fiscal Ricardo Toranzos. Es más, uno de ellos ni siquiera contrató abogado y es asistido por el defensor oficial, mientras que el otro recibió consejos de un profesional que habría llegado representando los intereses del comprador de la sustancia, según comentó una fuente con acceso a las partes.
En la avioneta Cessna que piloteaban los jóvenes bolivianos no encontraron la cocaína. Y los pilotos sólo llevaban algo más de 4 kilos en una mochila cuando los capturaron tras un rastrillaje en un monte a más de 5 kilómetros del lugar del aterrizaje. Se sospecha, y además encontraron huellas, que pudieron haber cargado la mercancía, de poco menos de 300 kilos, en dos camionetas en las que se habrían movilizado los compradores argentinos. Si bien existen muchos puntos oscuros, tanto investigadores federales como provinciales intentarán responder varias preguntas con el análisis de un GPS que tenía la avioneta como de las comunicaciones que hicieron los sospechosos.
Si bien los investigadores mencionan alrededor de 50 vuelos diarios, muchos de estos envíos de cocaína terminan en Brasil y Paraguay, donde existiría otro importante centro de distribución. El clorhidrato de cocaína que comercializaría esta banda se produciría tanto en la región del Beni como en la vecina Santa Cruz de la Sierra.
La supuesta «alianza criminal del Mercosur» en nuestro país podría llegar a incluir a narcotraficantes que operarían en Salta, Tucumán y Santiago del Estero. Desde allí se encargarían del segundo tramo del tráfico: colocar la cocaína en los grandes centros de comercialización: Buenos Aires, Rosario, Mendoza, entre otras ciudades. También serían los proveedores principales de la cocaína que se envía oculta en contenedores, muchas veces partiendo desde las provincias de la Patagonia, a Europa y Asia.
Los especialistas federales en narcotráfico de nuestro país tomaron contacto esta semana con la causa de los pilotos bolivianos capturados en Salta, puesto que presumen que siguiendo los pasos de estos jóvenes universitarios, podrían llegar a darle un golpe a la misteriosa alianza de narcos.
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